Las organizaciones y personas que firmamos este Manifiesto (docentes, madres, padres, estudiantes y ciudadanía en general) estamos profundamente preocupados por la difusión de creencias sobre la escuela española que distorsionan gravemente la realidad. Se está generalizando una forma de pensar según la cual hoy en la escuela se enseñan pocos contenidos, se hacen actividades irrelevantes, los niveles de exigencia bajan, los alumnos y alumnas son peores que los de antes y hay “mucha pedagogía” y poca enseñanza.
Nos preocupa particularmente la actitud de determinadas personas con impacto mediático (pertenecientes al ámbito de la literatura, de la universidad, de la intelectualidad, etc.) que divulgan estas creencias con argumentos muy pobres, a veces incluso insultantes, poniendo en evidencia una visión poco rigurosa sobre la escuela y sobre los procesos que en ella tienen lugar. Nos preocupa, en fin, que la educación, a diferencia de otras actividades de gran incidencia social como la medicina o la justicia, sea analizada y valorada socialmente desde concepciones simples y caducas.
Por todo ello, hemos decidido manifestarnos colectivamente y hacer pública nuestra opinión, afirmando lo siguiente:
Sigue leyendo en NO ES VERDAD (Manifiesto pedagógico)
Yo, como Educador Social y futuro pedagogo, me sumo a este manifiesto.
Lo siento, pero este panfleto me parece un aluvión de falsedades, mentiras y estupideces.
1º) SÍ es verdad que los contenidos se han rebajado muchísimo: sólo hay que comparar el tamaño de los libros de texto de antes (enorme) con el de los de ahora (pequeño y con muchos dibujitos).
2º) SÍ es verdad que la mayoría de los niños de ahora son mucho peores que los de antes: el alumno gamberro de antes era el que hablaba en clase. El alumno gamberro de ahora roba coches, le pega una paliza al profesor, escupe al profesor, insulta a sus compañeros y al profesor, es agresivo, violento y hay que aguantarlo hasta los 16 años gracias a los pedagogos ignorantes con título que hicieron la LOGSE.
Por favor, basta de tonterías.
Creo que la posible «escasez» que cierto padres pueden ver en sus hijos, no depende en nada de lo que sólo las escuelas o los profesores les enseñen. La educación de un niño la empiezan los padres.
Además me resulta llamativo que se quejen sin hacer o proponer un cambio, una posible solución.
Entones si profundamente preocupados están como dicen en el manifiesto,creo que la solución no es colgarlo en internet.
Suscribo todas y cada una de las opiniones de Joaquín. Parece que los que han perpetrado este escrito, en apoyo a la LOGSE, y los que lo suscriben no han pisado un aula desde 1990.
Que montón de bazofia ideológica.
Parece que habrá que pesar los libros para constatar la «decadencia» del sistema educativo. Ciertamente, las críticas al manifiesto dejan mucho que desear, y se sitúan en la misma línea insustancial y panfletaria del «Panfleto antipedagógico».
Un saludo
Para Joaquín.
1. Puede que el tamaño de los libros de texto sea menor, como dice el anterior comentarista igual hemos de pesarlo y así medir el nivel educativo. La Educación Obligatoria comprende ahora más años que antes y por lo tanto más cursos. Eso sin contar la educación infantil, que aunque no es obligatoria si está generalizada, y en su segundo ciclo tiene un carácter primordialmente educativo. Si hacemos cuentas nos salen unos cuantos añitos más, igual si tiramos de báscula hasta pesan más los libros de ahora juntos que los de antes.
2. Querer generalizar casos aislados de agresiones a profesores parece bastante alarmista. Ahora como antes hay alumnos/as que dan guerra, se hacen pirolas, etc. Y un porcentaje mínimo que puede caer incidentes más graves. Sin duda eso no es sólo responsabilidad de los chavales y/o sus padres, sino de la sociedad en conjunto. Es tarea de todos atajar estas situaciones y no usarlas de manera demagógica y alarmista, entre otros, en los medios de comunicación.
3. Ahora la enseñanza está generalizada a toda la población (niños, niñas, en pueblos, en ciudades…). No sólo la educación obligatoria, sino a niveles superiores como la secundaria no obligatoria: Bachiller, FP. y otros estudios superiores.
Esto antes sno era así.
No sé si estas no verdades que recopiláis aquí serán no verdaderas, pero… lo que es un hecho es que muchas cosas están fallando en el actual sistema educativo; es un hecho también que la educación debería ser una materia mucho más protegida, casi blindada, en la que las reformas no deberían depender de políticas de turno, sino necesitar un amplio consenso y una extensa reflexión; es un hecho que el fracaso escolar está a la orden del día y que los niños no se educan ni en la escuela ni en casa: en casa porque los padres no disponen del tiempo suficiente para hacer, debido a sus múltiples y exigentes obligaciones (cuya procedencia ya es otra historia), y en el colegio porque, entre otras muchas cosas, los padres ponen trabas sin darse cuenta, intentando ganar a sus hijos en un terreno y de una manera que no son los adecuados. Es un terreno tan amplio y conflictivo que no se sabe por dónde empezar… pero habrá que empezar.
Hola Luis.
Siento usar el espacio designado a comentarios de este artículo para hacerte una consulta relacionada con otro tema, pero he buscado una dirección de contacto para enviarte un email y no la he encontrado.
Es en referencia a tu artículo sobre propiedad intelectual en internet
http://www.orientaeduc.com/blog/2007/derechos-de-autor-y-propiedad-intelectual-en-internet/
Vamos a abrir en diciembre un portal literario Todos son textos originales y nunca antes publicados (por extensión, carentes de copyright). Tememos que, tal como vemos el mercadeo de partes de textos -o, incluso, de textos completos- bajo las excusas más peregrinas en internet, nos puedan hacer alguna sangría. ¿Qué nos aconsejas? ¿Qué vías podemos usar para preservar los textos que vayamos publicando? Un saludo!
Luis.
PD: Por cierto, yo también soy psicólogo. jeje.
Sí que es verdad que el nivel está por los suelos.
Lo saben los profes, lo saben los alumnos, lo corroboran los estudios realizados por terceros.
¿Qué es este panfleto? ¿Desinformación o cinismo?
Lo verdaderamente importante es que se está debatiendo un tema de crucial importancia social. Expresáis vuestras opiniones y probablemente haya mucho de cierto en ellas pues todo depende de la mirada del observador. Soy profesora y vivo cada día la situación de las aulas y lo que verdaderamente me preocupa es sentir que los alumnos de hoy día no tienen ilusión por el mañana. ¿Qué está pasando? Y para no extenderme más, animo a todos a participar en la firma del manifiesto NO ES VERDAD pues ante todo promueve el debate social de un tema tan importante como es la situación educativa en nuestro país.
Joaquín,
¿trabajas en algún sector educativo? O hablas desde tu conocimiento de causa personal. Que a priori, parece bastante escaso.
Considerar que un libro más gordo tiene más contenidos, suena escaso como argumento. No por memorizar más se sabe más… Bueno, habría mcuho que decir de este argumento.
Consider a los niños más malos que los de antes, es algo muy típico del cambio generacional. Te dejo esta frase (espero que te haga reflexionar):
«nuestros jóvenes ahora aman el lujo, tienen pésimos modales y desdeñan la Autoridad. Muestran poco respeto por sus superiores y prefieren la conversación insusla al ejercicio. Los muchachos son ahora los tirános y no los que colaboran con sus hogares. Ya no se levantan cuando alguién entra en el hogar, no respetan a los padres y tiranizan a sus maestros»
Dicho por: Aristóteles, siglo IV A.C.
Soy profesor de infantil y primaria, monitor de tiempo libre y colaboro regularmente en un Claustro de Formación Permanente e Innovación Pedagógica.
Paco,
la cita que atribuyes a Aristóteles, puede ser apócrifa, pero creo que se suele considerar de Sócrates.
Un saludo
¡Aaaaah! El panfleto antipedagógico… Mi Biblia.
Espero que Joaquin y compañía no sean profesores. Lo espero, pero temo que algunos lo sean. A riesgo de dar una opinión muy impopular, creo que la mala formación que da nuestra Universidad y la gestión pública deficiente tienen mucha culpa de que la educación no sea mejor. No se evalúa racionalmente el sistema, ni el desempeño de los profesores, y no se pide a estos una buena formación.
Rafael Porlán Ariza el autor de este sinsentido, si es quien yo creo, no ha pisado un aula con menores de 14 años desde que salió del cole. ¡Qué montón de basura pseudointelectual, partidista y torticera! Lo que menos necesita la educación son teóricos de este tipo y lo que sí requiere es gente responsable que sepa, de verdad, cuales son los mecanismos del aprendizaje a las diferentes edades y darse cuenta de que no hay dos niños iguales.
Motivar, envolver y esfuerzo por parte del discente. Punto pelota.
Abur
Y si ahora te digo, después de leer tu manifiesto : «No he entendido nada de lo que me dices». Después de todo, me has enviado un texto para que lo lea y lo aprenda. Un método muy tradicional de transmisión del conocimiento. Demasiado tradicional para mí. Gracias de todos modos.
Alfredo: Estoy de acuerdo contigo en lo de los libros de texto, pero que conste que quien empieza a comparar libros de texto es el propio manifiesto. (el pedagógico)
El declive y la decadencia de la educación en nuestro país se acentuó de manera notable tras la implantación de la LOGSE en el año 90, con sus teorías y métodos pedagógicos «revolucionarios». Toda reflexión debe partir de los hechos constatados y probados. Sobre esta realidad, que hasta el propio manifiesto reconoce, me parece un despropósito la afirmación, casi ridícula, de que «El cambio que proponemos no puede venir de la mano del modelo tradicional, como reclaman algunos, ignorando que dicho modelo es el responsable del fracaso actual» (sic). O sea, que tras la implantación de la LOGSE y la llegada del fracaso, la culpa es… ¡del sistema anterior! ¡Qué poco rigor, señores!
Puede que hayan cambiado muchas cosas, como la explosión de la sociedad de la información y las telecomunicaciones, pero la naturaleza y capacidad de aprendizaje del ser humano, incluyendo la de nuestros jóvenes, sigue siendo la misma (¿o acaso ha habido algún misterioso cambio evolutivo en las dos últimas décadas?).
Soy profesor de ciencias, intento aplicar la objetividad y el sentido común en todo lo que analizo, y tras ello puedo concluir, con mis escasos nueve años de experiencia, que la nueva legislación:
1) No promueve el esfuerzo en modo alguno, con la demonización excesiva de la memorización. Es necesario conjugar la memorización de la información con la aplicación de la misma a casos concretos (los relativos a la vida real, ¡por supuesto, si eso nadie lo niega!)
2)No atiende correctamente a la diversidad del alumnado(por muchas diversificaciones y refuerzos que haya), especialmente en el tramo de los 14 a los 16 (pretender que el obligar a asistir a clase a un alumno de 15 significa que esté escolarizado, en el sentido tradicional, es una distorsión, pudiendo constatar que muchos en esta situación simplemente están «recogidos»). No se le ofrecen alternativas al alumnado de cierta edad cuyo desfase y desmotivación son insalvables, con lo que lo único que hacen es acumular años perdidos totalmente improductivos.
3) Por supuesto que los chavales de hoy han cambiado, en paralelo a la sociedad en la que viven, que ya no se parece a la de hace tan sólo tres décadas. No son peores chavales en modo alguno, pero sí es cierto que la figura de autoridad, no sólo del profesorado, sino del ámbito familiar y social, se ha relajado notablemente, pero es precisamente por eso por lo que son más necesarias ahora medidas de refuerzo de esa autoridad perdida, y no al contrario (adaptarnos nosotros a esa «situación» con paciencia). Quizá estamos inmersos en el efecto rebote, donde hemos basculado de la autoridad absoluta del franquismo, a la negación total de la misma. Si se le quita autoridad al profesorado, el clima en el aula puede hacerse incontrolable y desquiciante, y por consiguiente, poco propicio a la motivación y el aprendizaje.
Este manifiesto, en mi opinión, creo que no se ajusta ni a la realidad de la educación hoy en día, como cuando afirma que el nivel actual es superior al del «antiguo sistema» (personalmente, no me extrañaría que hubiera sido redactado por alguien que no está ejerciendo la profesión actualmente), ni tampoco acierta en las causas que explican el fracaso: los profesores siguen una enseñanza tradicional, etc. Incluso, tácitamente, nos culpa a los profesionales de la enseñanza de los fallos del sistema, lo cual es inadmisible.
El Manifiesto «No es verdad» me parece un cúmulo de despropósitos. He redactado un escrito titulado «No es verdad que no sea veerdad» en el cual contesto punto por punto al susodicho Manifiesto. Es un poco largo (unas veinte páginas) pero si alguno lo quiere conocer, que se ponga en contacto conmigo y se lo haré llegar. Mi correo es moreno.castillo@terra.es Atentamente
Ricardo moreno Castillo
Quiero manifestarle mi total desacuerdo con ese panfleto que llaman «No es verdad. Manifiesto pedagógico». Incurre en enormes errores que, desgraciadamente, venimos oyendo y soportando desde hace años, sin hacer ninguna propuesta concreta. La enseñanza tradicional será muy mala, pero ha servido durante miles de años para la transmisión de conocimientos y no conviene eliminarla totalmente hasta que se dé una alternativa. Somos muchos los que, como Ricardo Moreno Castillo, estamos esperando esa propuesta para sustituirla.
Lo peor no es el manifiesto, sino el interés corporativo que subyace en él y que no solo pretende mantener la idea de que los pedagogos, psicólogos y demás familia son imprescindibles para que los profesores puedan realmente serlo, sino que apuntan a que deberían pasar todos ellos por sus manos durante uno, dos o, quizá, más años. La mejor forma para dominar el sistema. Y de hacerse imprescindibles en el proceso educativo.
En definitiva, desolador.
Quien esto escribe, lo hace desde la experiencia de 32 años de enseñanza directa con adolescentes y jóvenes, que ha sido Director, Jefe de Estudios, Jefe de Departamento, Tutor, …, que ha trabajado en institutos de pequeñas, medianas y grandes ciudades, de barrios acomodados y de barrios obreros. En definitiva, un experto en los temas que trata su demagógico «panfleto». Entiendo que ese manifiesto defienda aquello que da de comer a sus autores y que les proporciona una influencia en la sociedad que, según muchos de los profesionales de la enseñanza, está sobredimensionado, pero no me hagan creer que son ustedes expertos. Para ello hay que tener experiencia y la inmensa mayoría de pedagogos y de psicólogos carecen de ella. Aquellos que sí la tienen no son tan pretenciosos como los autores del escrito. Atentamente
Yo no se en que pais viven psicólogos y pedagogos. Lo que si sen es que ninguno de ellos pisa un aula a diario.
De nada vale que se escolarice hasya los 16 años si el nivel que adquieren es bastante menor que el que se obtenía hace 25 años con 14.
Seb destina mucho esfuerzo y dinero en quien no quiere ni deja aprender y no se hace nada por el alumno que si quiere.
Supongo que esta gente tendrá que justificar un sueldo, pero en mis 17 años como profesor no he visto NUNCA a un individuo de estos solucionar NI UN SOLO PROBLEWA
El Manifiesto No es Verdad está promovido por la Red IRES (Investigación y Renovación Escolar) que está formada por profesorado y grupos de profesoras y profesores de todos los niveles educativos -infantil, primaria, secundaria, universidad, adultos, educación especial, etc.- que tienen como referente para su trabajo el Modelo Didáctico de Investigación en la Escuela (MIE).
Los incrédulos pueden visitar http://www.redires.net/?q=quienes_somos
Cómo funciona esto?
PD: Demagogos!
por qué no me admiten comentarios
Llevo treinta años intentando ser un buen maestro. Empecé a aprender desde el primer día y todavía estoy en ello. He hecho montones de cursos, muchos de ellos en mi tiempo libre y pagados de mi bolsillo (no existían los CEP), he participado en grupos de trabajo, en proyectos,en elaboración de nuevo material didáctico. Todo para ser mejor maestro. Jamás he usado un libro de texto. No pretendo hacer una exaltación de méritos, sólo me pongo como exponente de muchos maestros (habrá que decir también maestras) que han hecho lo mismo, es decir, que hemos luchado por mejorar la escuela y ahora desde este manifiesto se nos insulta porque se nos responsabiliza de que la escuela siga siendo transmisionista, mecánica, repetitiva, sancionadora y selectiva.
Recuerdo un compañero que tenía plaza en mi centro pero al que cada año le daban una comisión de servicio porque se dedicaba a la investigación y a la formación del profesorado. Un curso se demoró la concesión de la comisión y tuvo que quedarse un mes en el centro y el pobre se quejaba amargamente de la clase que tenía y esperaba con anhelo la llegada del sustituto. Estos son los ideólogos de la escuela que tenemos. La de los ejes transversales, la de la celebración de los días de lo que haga falta, la de las planes de centro que duermen en los armarios, la de las memorias que nadie se lee, la de la integración que no se cumple, la de las implementaciones, la de los informes personales, la de los planes de, la de los proyectos de…
El señor Rafael Porlán en una entrevista en Canal Sur abogaba por maestros vocacionales y sobre todo motivadores y presumía de serlo con sus alumnos…universitarios. A éste me gustaría verlo en una clase de 28 de 1º o 2º de secundaria, a ver como los motiva.
Señores pedagogos, psicólogos, asesores, ponentes de cursos varios, ideólogos del sistema: ¡Váyanse a hacer puñetas!
El panfleto pedagógico No es verdad está muy bien respondido por Ricardo Moreno y a su intervención me remito. También se puede consultar en la página de la Asociación de Profesores de Instituto de Andalucía,
aso-apia.org.
Querría comentar algo sobre los libros de texto.
Soy profesor de Matemáticas del antiguo cuerpo de Profesores Agregados de Instituto. Hice aquellos bachilleratos, elemental y superior, con sus reválidas correspondientes y el curso Preuniversitario.
Conservo los libros de Matemáticas de Bachillerato de mi padre (1937 – sexto, 1938 – séptimo). editados por Eulogio de las Heras en Sevilla (8 pesetas de la época, no sé cuánto sería hoy). Sus contenidos son perfectamente
equiparables a los actuales, con una salvedad: las cosas se demuestran según se van presentando y no se relegan a una hipotética ampliación para superdotados.
Las dimensiones de los libros, en las tres direcciones del espacio son significativamente menores (17 cm por 12 cm y 250 páginas frente a las actuales 29 cm por 22 cm y 300 páginas). Si el contenido es, aproximadamente el
mismo, ¿qué ha pasado aquí?. Pues muy sencillo, nos los han inflado los del gremio espabilado.
Hace dos cursos, tuve una alumna alemana en 1º de Bachillerato de Ciencias. Para hacerme una idea de lo que podía haber estudiado (a comienzos de curso no hablaba español) le pedí que me trajera sus libros de Matemáticas.
Sus contenidos eran algo más avanzados y densos que los nuestros. Lo más curioso: por sus dimensiones y estructura se parecían… a los de mi padre.
El escándalo del gasto en libros de texto, al que parece ser que nos hemos acostumbrado, no es inevitable.
Este es otro misterio: ¿por qué sale tan cara la psicopedagogía?
Respuesta a un orientador: dice que nos olvidamos de que ellos también son docentes.
Esta es una verdad muy relativa. Conozco muchos orientadores. Los primeros que aparecieron habían sido maestros que
estudiaron psicología o pedagogía en la UNED, muchos cursando un curso puente, y aprovecharon la oportunidad de pasarse a los Institutos. No sabían, ni saben lo que es impartir 18 horas lectivas semanales de asignaturas fundamentales a 30 o 35 alumnos de 12 a 18 años.
Los que vinieron después ni siquiera tenían la experiencia de la escuela.
Algunos han dado alguna vez clase de Sociología o similar en el Bachillerato LOGSE. Pocos alumnos, algo, aunque poco, cribados por la ESO… con una asignatura sin la presión
de las pruebas de acceso. Una «maría» de las de antes.
En fin, que una cosa es formar parte del Claustro de Profesores y otra ser enseñante o docente, como prefiráis.
Salud a todos, pero muy especialmente para Ricardo.
Necesitamos voces como la tuya. Cuídate.
Me voy a hacer pesado, pero es que al parecer «tienen como referente para su trabajo el Modelo Didáctico de Investigación en la Escuela (MIE)».
Es que los profesores de Enseñanza Secundaria no damos clase en la escuela.
Somos profesores especialistas en nuestra materia que investigamos la mejor forma de transmitir nuestros conocimientos a nuestros alumnos, probamos y usamos las nuevas y las viejas Tecnologías de la Información y la Comunicación para explicar nuestra materia a los que desean aprender.
Algunos, por edad, tenemos la suerte de tener por compañeros de Claustro a antiguos alumnos y por ellos sabemos que no estamos demasiado apalancados.
Los que de verdad van quedándose rancios son los de Piaget, el conductismos, el constructivismo con sus correspondientes neos y el santón de los Ríos. Si tanto investigáis, asomaos a Rich-Harris, Pinker, Bunge, Damasio, Rubia, son otra cosa.
Sí es verdad
Para Áloe: no sé si Joaquín será profesor, pero yo sí lo soy, y suscribo bastante de lo que dice. No sólo hay muchos pedagogos que nuca han pisado un aula, también hay muchos profesores tan entusiastas de la LOGSE, que nunca se cogen la ESO por miedo a que les decepcione. Coherencia creo que se llama eso.
Muy cierto lo que dice Miguel de los orientadores, a los que en muchos sitios llaman los pakistaníes. Sí, por lo de «Esos, ¿pa k’istán aquí?»
Toda la vida matando burros y la cuadra llena (refrán euskaldún)
La LOGSE no se implantó nunca. Te lo dice una que vive de este negocio. Yo, al menos, la vi pasar por mi lado pero sólo en formato papel. En la práctica, aquellos que la desprecian son precisamente los que se permitieron el lujazo de no cumplirla ni en uno solo de sus planteamientos, pese a que cobran del erario público para, supuestamente, cumplir las leyes. (Jeje… me encanta este eterno y cínico debate sobre una ley que no existió)
Yo no estoy de acuerdo con este manifiesto, y a la vida misma (un periodo bastante corto de ella) me remito: tengo 22 años, y cuando yo iba al colegio/instituto, el concepto «repetidor» no entraba en nuestra vida hasta la ESO. En la Primaria, quien repetía solía ser por causas mayores como enfermedades, traslados, etc, nunca por falta de trabajo en la escuela. Si algún niño suspendía algo, ya acabando la Primaria, no solía ser más de una asignatura. Y yo iba a un colegio público de lo más humilde.
Hoy, mi sobrina, que hace primaria en un colegio que se supone con más recursos que el mío, tiene, tanto el año pasado como este (3º y 4º) repetidores en su clase, niños que han fracasado en la escuela en una etapa en la que hace poco esto era inimaginable.
Tengo amigas que trabajan en un colegio de bastante nivel donde las alumnas superan con creces los mínimos estipulados por la Comunidad de Madrid, y se les ha pedido en ocasiones que bajen el nivel, como si fuese un problema que esas niñas estén «demasidado» preparadas.
Seamos realistas, hay demasiada mediocridad en la educación, y mejorarlo es tarea de todos.
La talla moral e intelectual de Ricardo Moreno Castillo me parece fuera de toda duda. Comprendo que sus verdades, alejadas de la sofistería pedagógica y absolutamente razonables, molesten a un colectivo, que se encuentra muy cómodo situado donde está. Cada uno defiende sus intereses y es muy libre de creerse sus propias mentiras -es la estrategia del mediocre-, pero la diferencia con Ricardo Moreno Castillo es que él no tiene que defender intereses inmediatos, más allá del hacer justicia a la verdad y denunciar esto (esta lamentable «educación».)
= ) Manifiesto al poder!!!
Desde Argentina, apoyo este manifiesto. Cualquiera que se pronuncie en contra es porque de pedagogía y educación no sabe absolutamente NADA. Antes de opinar, por favor estudien. Sobre ciertos temas, no se puede dar una simple opinión de vecino.
saludos y a cambiar la educación!
El principal problema que hay hoy dia en las aulas, es el elevado desinteres que tienen todos los adolescentes por su devenir en la vida, tanto a nivel social, como por supuesto laboral. Con esto quiero decir que por supuesto las famílias son las que principalmente tienen que ayudar a que esto no sea así, pero nosotros los educadores o futuros educadores como yo, es nuestro deber motivar y conseguir una sociedad de adolescentes más autónomos y creativos. Claro esto solo se consigue con muchas ganas de trabajar!!